Santo Domingo, 19 de agosto de 2020 – El Movimiento Reconocido valoró como un paso importante de garantía de derechos, la acción realizada por el ex presidente Danilo Medina, de reconocer la nacionalidad dominicana, mediante naturalización, a 750 personas de ascendencia haitiana que aplicaron al proceso especial de naturalización mediante la Ley 169-14, para restituir lo que la Sentencia 168-13 arrebató irracional e ilegalmente.
Sin embargo reiteramos que aquella persona les corresponde la nacionalidad por nacimiento (jus solis) en territorio de la República Dominicana, porque nacieron en este territorio antes de la Constitución de 2010, entendemos que la naturalización constituye un paso hacia adelante y abre las puertas a la nacionalidad dominicana.
La medida tomada por la autoridades del pasado gobierno pudo haberse adoptado con mayor margen de tiempo dado que han transcurrido 5 años desde la aplicación a naturalización, y de ese modo un mayor número de personas afectadas por la referida sentencia hubiesen sido beneficiarias de la nacionalidad dominicana, pudiendo así disminuir los daños irreparables y continuar con un proyecto de vida, a la vez que un número mayor de personas podría haberse beneficiado.
Al naturalizar a tan solo alrededor del 9% de los más de 8 mil que aplicaron a la Naturalización especial, el ex presidente Danilo Medina deja una considerable deuda social y de justicia a miles de personas que aguardan una desesperante fila para poder acceder a la nacionalidad dominicana que fue suprimida en clara violación a los derechos humanos.
Ahora corresponde al presidente Luis Abinader actuar con justicia y responsabilidad. La nacionalidad de miles de dominicanos/as de ascendencia haitiana está en sus manos, y esperamos ansiosamente que dé una respuesta contundente y positiva a esta situación con la operatividad de la naturalización de los 750, pero también con los más de 8 mil aplicantes a la Ley 169-14 que aún esperan la Naturalización especial, y con los miles de personas nacidas en territorio dominicano que no tienen nacionalidad ni solución jurídica.
Hacemos un llamado al Presidente Luis Abinader a corregir los errores cometidos que ralentizaron el proceso para hacerles justicia a los dominicanos afectados por esta injusta sentencia. De manera tal que cada uno de los compatriotas puedan ver una oportunidad para vivir dignamente como seres humanos, disminuir los daños materiales e inmateriales y desarrollar un proyecto de vida. Reiteramos la disposición de colaborar con las nuevas autoridades, que permita desarrollar un proceso libre de costo en la aplicación del decreto que le otorga la nacionalidad mediante naturalización especial.
Solicitamos al presidente Luis Abinader, impulsar políticas públicas y marcos legales inclusivos para garantizar el goce a los derechos fundamentales de los miles de jóvenes dominicanos de ascendencia haitiana que hasta hoy se han visto excluidos por la política de desnacionalización del estado dominicano.
Aspiramos a que el gobierno del cambio no excluya a nadie.
